Ojalá te dieras cuenta que el Amor es un compartir, no una lucha de poder.

Ojalá te dieras cuenta que las cosas se hacen porque salen, no para compararse o equilibrar para que el otro sienta el dolor que tu sentiste… Que sepas que ese dolor ya venía de antes. Siempre viene de antes… pero lo proyectas en mi… En el otro.

Ojalá te dieras cuenta que cuando alguien dice algo en una relación, no es para siempre, que las cosas cambian, se hablan y todo se redirige.
No, con una cabezonería extrema, si algo te duele, lo repites hasta la saciedad…

Que si no te pudieron coger el teléfono una vez, no es razón para que no se lo cojas a la otra persona nunca más.
Como un niño dolido que remata hacia el otro su propio dolor…
Así sólo cabe el dolor que se va haciendo cada vez más grande y el amor se va diluyendo, apagando y alejando…
Ojalá te dieras cuenta que el Amor es un compartir, y se le pregunta a la otra persona que hacer juntos o que es lo que os llena a ambos…

Ojalá te dieras cuenta que cuando las cosas se hacen desde el corazón y con un impulso, no hay dobles intenciones detrás.

Cuando tu las repites por dolor, ahí ya hay una intención retorcida…

Ojalá te dieras cuenta que para que haya una relación profunda, ha de haber mucha comunicación y mucha intimidad sin ni siquiera sexo.

Ojalá te dieras cuenta que hace falta mucha tolerancia y apertura de corazón para poder seguir dando pasos.

Ojalá te dieras cuenta que el miedo de tu corazón, impide que llegue ese amor real, porque para que ese amor llegue hace falta abrirse a tu propia vulnerabilidad y a tu dolor.

Ojalá te dieras cuenta que el otro también sufre pero con unos conceptos muy diferentes de los tuyos y que aunque lo sepas en la teoría, la práctica es muy diferente….

Ojalá te dieras cuenta, que abrir el corazón, y no solo el sexo, duele… pero te trae regalos maravillosos de la existencia. Pero que hay que estar dispuesto a abrirlo a pesar del dolor y del miedo.

Ojalá te dieras cuenta que hace falta mucha tolerancia y paciencia para comprendernos porque somos diferentes y que cuando uno se abre, si el otro se cierra, no hay por donde cogerlo… y sigue siendo una lucha continua….

Ojalá te dieras cuenta que cuando has repetido una cosa hasta la saciedad, se cumple, la haces real, porque tú miedo y tu dolor no deja de proyectarla en el otro hasta que sea cierta…

Ojalá te dieras cuenta que seguir repitiendo continuamente lo que te produjo dolor recordándolo a la otra persona, solo trae más dolor y más profundo.

Mi corazón está cansado de buscar ese espacio seguro en el que asentarse para abrirse a su propia vulnerabilidad y poder ser comprendido…

Sólo así se siente seguro, y desde la seguridad se construye. Desde el dolor y la venganza se destruye….

Ojalá te dieras cuenta que estás tan en mi corazón que ya no sé cómo expresarlo ni que camino buscar para acercarnos y que tanta frialdad duele tanto, que solo me queda, rendirme… y dejar que se apague por si solo porque solo siento que me estoy dando chocazos contra un muro…

 

Luchas de poder

Con todo mi corazón, este texto es para todas aquellas personas que han vivido alguna vez o muchas veces luchas de poder en la relación. O en las relaciones, y sienten que se repiten ciclos de los que no pueden salir.

 
Carol Rodríguez